miércoles, 28 de diciembre de 2011

Comienzo del Tratamiento sin Medicación


Dr. Silvio Najt, 

Ayer comencé con la dieta y quería saber si debo tomar algún complemento vitamínico o proteico o agregar a la dieta alimentos con mayor aporte calórico para no seguir bajando de peso. Mi contextura normal es delgada y en estos últimos meses baje mucho de peso y estoy anémica porque también tenía náuseas y falta de apetito. Además de la medicación que ya le mencione estaba tomando Buscapina, Paracetamol y Ciprofloxacina y decidí dejar toda la medicación.

Hola XXXX,

Es problemático tratar una paciente tan medicada como vos, con tantos problemas sin verlo, sin examinarlo y sin tener enfrente los estudios de laboratorio y de exploración que seguramente tendrás. 

Un consejo general para reforzar la dieta líquida es agregar claras de huevos a todo lo que puedas, incorporar mucha manteca y cremas a cada plato, tanto para cocinar como para "engordar" el alimento e ingerir algún polivitaminico del mercado, hay uno reforzado con Zinc que tiene casi todo lo necesario para esta etapa.

La medicación que mencionas, buscapina, es un "antiespasmódico" que usado en Colitis Ulcerosa es el culpable de la peor de las complicaciones de esta enfermedad: el megacolon tóxico. Asi que NUNCA MAS uses esta medicación.
Paracetamol, este es un antiinflamatorio analgésico de la familia de los AINES (antiinflamatorio no-esteroideo), otros en el grupo son aspirina, ibuprofeno, acetaminofeno, naproxeno, etc. en la literatura médica hay cientos de casos descriptos de pacientes con CU que se "brotan" (hacen episodios de hemorragia e inflamación con diarrea) cuando toman estos "inocentes" remedios de venta libre.
Ciprofloxacina, es un antibiótico de amplio espectro al que nunca se le pudo demostrar ningún efecto beneficioso en CU, quizas pueda servir en ciertas situaciones en Enfermedad de Crohn, aunque lo dudo. Lo que si produce es una profunda alteración de la flora bacteriana, que hoy se sabe que hay que cuidar porque probablemente alli resida una de la causas de la CU.

Espero que esto ayude
Sigamos en contacto. Saludos

Dr. Najt 



martes, 27 de diciembre de 2011

Colitis Ulcerosa que no mejora con medicacion

A continuación transcribo un mensaje que recibo con frecuencia de pacientes que padecen Colitis Ulcerosa y que no encuentran una respuesta en el tratamiento médico habitual, por lo general, suelen empeorar

Estimado Dr.Najt:

Mi nombre es XXXXX, tengo 18 años y me diagnosticaron CU hace 6 meses. Me trataron con corticoides por vía oral, enemas de Budesonida, supositorios de Mesalazina, 6 comprimidos de 800 mg de Mesalazina por día y aún así sigo con sangrado, diarrea, gases, dolor abdominal y más de 10 deposicones por día. Me proponen continuar con tratamiento inmunosupresor (Azatioprina) o Infliximab. Me gustaría intentar con la dieta que usted propone en su blog. Podría darme información más específica de como debo excluir los alimentos que menciono en su blog y cuales son los que debo incorporar y en que forma. Gracias por su atención.

Hola XXXX,
Me alegro que te hayas decidido a hacer algo para salir del circuito:
CU --> Medicacion + CU + Medicacion y asi hasta la cirugía, locura total.
La unica forma de salir es entendiendo que el intestino no es de plastico, que interactua constantemente con lo que le ofrecemos, es decir con los alimentos. La estrategia es hacer por lo menos 15 dias de dieta antiinflamantoria, es decir casi exclusivamente liquidos, caldos (de pollo, carne u hongos), gelatinas, frutas hervida (manzana, pera, durazno) nada de azucares, solamente miel pura -con moderación. Solo infusiones de te o cafe muy flojas, endulzadas con Stevia líquida. Yogurt de mas de 24 hs:
  Cómo preparar yougurt en casa.
1 litro de leche cruda, se la pone a calentar sobre el fuego moderado, nunca en microondas pues se destruyen las proteínas y matamos las bacterias que queremos cuidar. Se la revuelve frecuentemente con cuchara de madera. Se deja que alcance unos 50 ºC, se baja el fuego para que se mantenga en esa temperatura de 5 a 10 minutos, siga revolviendo.
Una vez pasado ese tiempo, se la deja enfriar hasta los 40 ºC y se le agrega unos 150 a 200 cc de un yogurt comercial. Este es un tema, hay que tratar de conseguir un yogurt lo más natural y sin agregados posible, sin sabor, ni frutas, natural pero cuanto más orgánico (menos industrial) mejor es para nuestro yougurt casero.
Se mezcla bien y se coloca por ejemplo en una jarra cerámica previamente entibiada. El yogurt se debe mantener en una temperatura constante de 38 a 42 ºC durante por lo menos 8 horas, el ideal es 24 hs, pues de esa forma se consume toda la lactosa y se potencia la cantidad de bacterias en su contenido. Luego se lo lleva a la heladera.
Es un alimento muy recomendable para todas las edades y aún para las pocas personas que presentan intolerancia a los lacteos "crudos" pues luego de las 24 hs desaparece la lactosa que es la principal causante de esa intolerancia.
  
Desconozco tu estado de nutricional, por lo tanto no puedo aventurar mas que hasta aqui en cuanto a calorias, aportes vitaminicos, etc.
Un elemento muy importante si estas sangrando es aportar una buena cantidad de Viamina C, pero en esta etapa no hay que ingerir cítricos pues son muy agresivos para la mucosa (salvo agregar una pocas gotas de limón fresco al agua que se ingiere) por ello es bueno agregar algun compuesto que tenga ASCORBATO DE SODIO en vez de Acido Ascorbico que es el mas habitual, el segundo agrede la mucosa intestinal y hay que evitarlo.
La dieta sigue a continuación de las dos semanas con incorporaciones progresivas de alimentos probando tolerancia, como si fueses un bebe al que se le va dando de a poco los nuevos alimentos hasta identificar aquel o aquellos que te provocan síntomas.
Espero que esto te ayude a comenzar a mejorar tu situación
Mucha suerte
Dr. Silvio Najt

miércoles, 21 de diciembre de 2011

¿Nos acostumbramos a tener Diarrea?

Vengo notando hace ya un tiempo que algunos pacientes con Colitis ulcerosa o Enfermedad de Crohn se “resignan a tener la enfermedad” o “se adaptan” o “se acostumbran” a la misma.
Me parece curioso esto de aceptar estas situaciones de “inferioridad” a las que los síntomas de las EII someten a los que las padecen.
 …siempre necesito un baño cerca…tuve varios “accidentes” en lugares públicos… me tengo que levantar de la mesa en medio de la comida… mojé la cama en medio de la noche, y otras mil frases similares.
Pienso que si nos adaptamos a estas situaciones, terminamos dejando que estos trastornos dominen nuestras vidas: casi no salimos, casi no socializamos con otros, tenemos una vida de pareja y sexual desastrosa. En la medida que esto sea aceptado sin tratar de modificarlo, estamos condenados a que esto se amplíe y perpetúe en el tiempo.
¿Pero qué hacer, que se puede modificar para que esto no nos domine?
Fundamentalmente entender que estos síntomas están íntimamente relacionados con nuestras emociones, que en la medida que escuchemos lo que nuestro cuerpo nos dice, podremos empezar a tener un diálogo más fructífero con él.
He visto en numerosos pacientes que cuando están en actividades que los atrae, que los atrapa, se olvidan de ir al baño. Pueden pasar un gran número de horas sin acordarse que existe su intestino.
¿Y esto como se explica? ¿Cómo es posible que a veces en una ligera discusión tengamos que salir corriendo al baño porque no llegamos?
Alguna relación entre la mente, los sentimientos, las emociones y los intestinos tiene que existir. La clave está en entender cuál es esa relación, cómo podemos “entrenarnos” para que esta sensación de urgencia de ir al baño pase, que podamos “frenar” la velocidad del tránsito intestinal y lograr decidir nosotros cuando ir al baño.
Por otra parte todas las medidas farmacológicas que nos podrían ayudar a frenar estos episodios, terminan por suprimir las reacciones que normalmente tendría nuestro intestino, con el resultado de un aumento en la inflamación y tensión abdominal. Con ello quiero  decir que la diarrea, el aumento de las deposiciones tiene un sentido, está sirviendo para “barrer” algo que le pasa al intestino, si se suprime bruscamente, si se elimina ese “lavado” del intestino, muchas personas tienen la sensación de plenitud, dolor, gases,  etc. que puede terminar en situaciones muy desagradables.
Una posible estrategia inicial bastante eficaz es la de practicar yoga. El yoga nos permite controlar la respiración, concientizar nuestro cuerpo y alcanzar ciertos equilibrios que ayudan enormemente a los que padecen EII. En vez de “distraernos” como ocurre cuando vamos al cine y la película nos atrapa, podremos mediante los ejercicios del yoga conectarnos con nuestras vísceras para establecer un buen diálogo interior.
La otra estrategia que nos ayuda a dominar estos episodios es la disminución de la inflamación mediante un tratamiento adecuado, no farmacológico, que nos permita restituir la salud de nuestros intestinos.

domingo, 18 de diciembre de 2011

Complicaciones de la Colitis Ulcerosa

Las enfermedades inflamatorias del intestino (EII) no son trastornos aislados del aparato digestivo, muy por el contrario, son la manifestación de un proceso sistémico, de todo el organismo, por lo tanto además de los síntomas intestinales hay numerosas manifestaciones en otros órganos que pueden ser tan o más importantes que los digestivos.
Los otros sitios del cuerpo donde es posible ver cuadros asociados a las EII son, los ojos, la piel, las articulaciones, los riñones, el hígado y la coagulación sanguínea.
1. Ojos, aqui se pueden presentar diferentes situaciones aunque hay dos que son las más frecuentes: epiescleritis y uveitis, ambas son emergencias que obligan a consultar con esl especialista para tratarlas y evitar complicaciones que pueden terminar en ceguera. ¿Cómo identificarlas? ambas provocan un "ojo rojo" que es a veces dificil de diferenciar de una conjuntivitis común, los ojos duelen, no se tolera la luz, hay dolor de cabeza, puede haber vómitos, y puede haber visión borrosa. Es conveniente aclararle al oftalmólogo que trate este cuadro que el paciente padece una EII pues a veces sin este dato el especialista puede pensar en otras situaciones y no darle la importancia que tienen.
2. Piel, la complicación más frecuente en la piel se denomina eritema nodoso, estos nódulos rojos y dolorosos que aparecen en las piernas o en los brazos y que tienden a desaparecen al poco tiempo.


Pioderma grangrenoso: se manifiesta inicialmente como una ampolla en piernas o brazos, en general en algún sitio donde hubo alguna lesión previa tal como golpe o raspadura. La ampolla tiende a progresar hacia la ulceración y extensión de la lesión.


3. Articulaciones se trata de artritis perifèricas, la inflamación de las articulaciones treae dolor, con dificultad para mover las partes afectadas, son migratrices, es decir que las articulaciones comprometidas son diferentes cada pocos días, no dejan lesión permanente y tienden a mejorar cuando mejoran los síntomas intestinales.

4. Riñón, algunos pacientes desarrollan cálculos renales debido a diferentes trastornos en el metabolismo de el calcio y los minerales.

5. Hígado, pueden surgir varios problemas, por ejemplo hepatitis, cálculos biliares y una complicación muy temida que es la colangitis esclerosante primaria que se manifiesta por alteración de los parámetros hepáticos en sangre (enzimas, fosfatasa alcalina, etc) por la aparición de prurito ( sensación de picazón) y mucho cansancio. Un pequeño grupo debuta con fiebre, ictericia (color amarillo en la piel) y dolor en la zona hepática.

viernes, 9 de diciembre de 2011

Evitar estos Alimentos en la Colitis Ulcerosa y en enf de Crohn

Azúcar: es un disacárido que no se degrada por la inflamación del intestino, llega al colon y "alimenta" bacterias. Podemos endulzar con STEVIA líquida, que no agrede el intestino.
Papas y batatas (o patatas dulces): son polisacaridos que al igual que el azùcar agreden el intestino
Harinas de trigo, centeno y cebada: no existe aún una buena explicación del porqué agreden la mucosa intestinal, pero en mi experiencia con los pacientes que se encuentran en recuperación, cuando introduzco cualquiera de estas harinas vuelven a tener diarreas y a veces sangran.
Arroz: algunos pacientes no pueden tolerarlo. El consejo es una vez recuperado el intestino y recompuesta la mucosa intestinal, podemos probar si toleramos su introducción, en pequeñas porciones y viendo la reacción de nuestro cuerpo.
Aceite de Maiz, nunca consumirlo pues produce más inflamación, el de oliva y girasol son los más adecuados.
Más adelante seguiremos describiendo otros alimentos

jueves, 8 de diciembre de 2011

Enfermedad Inflamatoria de Intestinos Crohn y Colitis Ulcerosa ¿existe alguna relación entre ellas y la comida?

Si consultamos los grandes libros referidos específicamente a enfermedades inflamatorias de intestino (EII), una subespecialidad de la gastroenterología, nos encontramos que en la mayoría de ellos hay un capítulo referido a “Nutrición y EII”. Mi reacción habitual es comenzar a leer estos libros por ese capítulo, dado que en mi experiencia práctica de los últimos años encuentro cada vez más relación entre los nutrientes y las enfermedades.  Pero debo confesar que una y otra vez me frustro pues no  encuentro referencia alguna al posible origen o al mantenimiento del estado inflamatorio provocado por los alimentos. Los autores de estos libros simplemente niegan que exista tal conexión.
Recientemente caí en la cuenta que para la gastroenterología hay muy pocas enfermedades que puedan explicarse a través de los alimentos, clásicamente las “alergias alimenticias”, recientemente, la enfermedad celíaca y aún más recientemente la “sensibilidad al gluten” entidad pobremente definida hasta el día de hoy. Y no mucho más. Pero sería válido preguntarnos si la ingesta de alimentos no tiene influencia en muchas otras situaciones clínicas, yo he visto pacientes con psoriasis (enfermedad en la piel), artritis, asma, colitis ulcerosa, enfermedad de Crohn, colangitis esclerosante primaria, etc. que tienen significativos cambios en los síntomas y la evolución de la enfermedad gracias a modificaciones en la dieta. Será pura casualidad?
La pregunta es ¿porqué la medicina tradicional, la de los libros de texto, no acepta que existe la posibilidad que la comida que consume el paciente tenga algún efecto sobre la enfermedad que padece?
Hasta 1950 se careció de una clara identificación del gluten como agente de producción de la enfermedad celíaca, luego de entender que esta tenía estrecha relación con la ingesta de trigo, cebada y centeno, se fue lentamente ampliando el efecto de ese gluten hacia otras enfermedades  -autismo, esquizofrenia, etc. Hoy en día se supone con mucho fundamento que estamos frente a agentes alimenticios capaces de provocar numerosos "otros" problemas en el cuerpo humano.
Por estas razones es que tiendo a tratar los casos de EII desde el inicio con una dieta muy restringida que carezca totalmente de “cereales  e hidratos de carbono complejos” con lo que habitualmente logro eliminar el sangrado, los dolores, los gases y el olor putrefacto de la materia fecal.
Luego de un proceso de recomposición de la flora bacteriana mediante alimentos que puedan actuar como precursores de “las buenas” bacterias junto con algunas otras substancias naturales logro estabilizar el cuadro inflamatorio. De allí en más el esfuerzo se centra en identificar los alimentos que tengan la potencialidad de provocar síntomas. Es como si el paciente fuese un niño recién nacido al que se le suministraran alimentos de a uno, probando tolerancia y acostumbrando al cuerpo a estas nuevas substancias. El mayor éxito terapéutico es identificar con claridad cuál es el alimento o el grupo de alimentos capaz de provocar síntomas. En general no hay dos casos (personas) iguales, todos somos distintos, tenemos diferentes respuestas y sensibilidades, por lo tanto este es un trabajo individual, laborioso y destinado a encontrar una solución para ese paciente, que puede no servir para los otros. A diferencia de la medicina que usa medicamentos el objetivo no es “probar” con distintas drogas hasta conseguir “anular” los síntomas, rogando que los efectos secundarios de esa droga no sean peores que los efectos beneficiosos y que los síntomas “tapados” no aparezcan por otro sitio.
En definitiva, los alimentos nos pueden alimentar, enfermar, curar, alegrar o deprimir. La cuestión es encontrar como nos resulta cada uno de ellos a cada uno de nosotros.

domingo, 4 de diciembre de 2011

¿Pero es tan difícil diagnosticar una Enfermedad Inflamatoria Intestinal?

Esta es una pregunta muy habitual tanto entre los lectores de este blog como entre los que me consultan en mi consultorio. Para la medicina existen entidades, "síndromes", aparentemente bien diferenciados, identificables sin dificultad y con precisos tratamientos. Por desgracia esto no es lo que le pasa a las personas de carne y hueso (e intestinos) que sufren estos cuadros. Todas las entidades mencionadas son extremadamente difíciles de diferenciar, se confunden unas con otras y muchas veces los diagnósticos con los que llega un paciente a la consulta son por "aproximación", sin ninguna certeza.

Otro elemento que enturbia aún más el tema es que con las intervenciones médicas, tanto diagnósticas como medicamentosas modifican lo que se denomina la "evolución natural de la enfermedad". Para ello les voy a relatar un ejemplo muy reciente: un joven de 25 años me consulta porque le diagnosticaron "colitis ulcerosa" hace pocos días. Trae una cantidad de estudios, entre ellos TRES colonoscopías realizadas en un corto lapso. La sintomatología que relata es poco relevante, excepto por una diarrea pertinaz y dolor abdominal que comenzó luego de la muerte de un familiar muy cercano a principios de este año. Los síntomas se agravan luego de estos estudios donde aparecen unas hemorroides producto de la diarrea y de los estudios, al tiempo que nota cierta cantidad (pequeña) de sangre fresca manchando las deposiciones. Los informes de los estudios colonoscópicos no mencionan ningún elemento que indique lesiones o patrones de enfermedad alguna. Sin embargo el gastroenterólogo tratante se "juega" y lo califica de colitico ulceroso. Por lo tanto lo medica como tal. Corticoides a altas dosis, mesalazina 4 gr por día, antibióticos en grandes dosis, etc.

Este angustiado joven sigue igual o peor y decide consultarme. Al examen físico no tiene ningún elemento que indique que esté enfermo, sus estudios nunca mostraron el más mínimo elemento que haga pensar en una enfermedad ni siquiera parecida a CU o Crohn. Mi impresión es que este cuadro de "irritación colónica" producto de una situación de gran angustia emocional (pérdida brusca de un familiar) se vio agravada enormemente por los estudios (la preparación para cada colonoscopía barre=destruye la flora intestinal) además de los antibióticos y la falta de una dieta antiinflamatoria y reparadora.

Estimo que su recuperación va a tomar por lo menos un año para volver a recomponer su flora intestinal original. Sus síntomas irán mejorando a medida que haga una dieta reparadora, lejos de los azúcares (salvo la miel), de las harinas, papas, batatas y excesos de hidratos de carbono. Un aspecto fundamental para su recuperación es trabajar el aspecto psicológico-emocional que lo llevó a esta situación.