La gente que padece síntomas tales como dolor, diarrea, sangrado, constipación, etc. tiende a intentar "eliminarlos" en forma rápida y drástica y es absolutamente entendible dadas las insoportables molestias que ellos nos traen.
Pero hay otra forma de entenderlos que puede resultar mucho más útil a la hora de modificarlos.
Tal como dije anteriormente, nuestro cuerpo es una máquina perfecta, o mejor aún, es una máquina inteligente, que hace las cosas por alguna razón, siempre tiene algún motivo por el cual hace lo que hace.
Entonces si pensamos que estos síntomas tan molestos son la respuesta del cuerpo frente a algo que no esta bien, la pregunta que cabe es ¿deberíamos eliminarlos a toda costa? ¿o estas manifestaciones están tratando de modificar algo que no está bien en nuestro cuerpo?
La respuesta que a mi más me satisface es que si, que estos síntomas tienen significado, algo pasa que obliga al cuerpo a provocar por ejemplo un cuadro de diarrea, el intestino está tratando de "lavar o eliminar" algo que no es correcto, algo que le irrita. Ahora bien, si pensamos de esa forma, entonces deberíamos ser respetuosos del síntoma, tratar de ayudar al cuerpo a que cumpla con esa tarea, no eliminar el mecanismo de manifestación sino la causa, y si no podemos eliminar la causa, suavizar los efectos del problema pero nunca "eliminar" el síntoma pues estamos dejando a nuestro cuerpo sin una poderosa arma y tal vez expuesto a que ese problema se amplie y complique.
Por ello frente a una diarrea por ejemplo en una colitis ulcerosa, el planteo es no usar los medicamentos que la detienen, pues se puede producir una terrible complicación llamada megacolon tóxico que casi siempre termina en una cirugía de urgencia.
Lo mismo puede decirse del resto de los síntomas mencionados al principio, cada uno tiene una explicación posible y una estrategia de "control" más que de "eliminación", en general con estrategias sistémicas y no con tratamientos sintomáticos locales.
Hay que tener siempre presente que las enfermedades inflamatorias son sistémicas, no solo hay manifestaciones en el aparato digestivo, sino en todo el organismo y todavía se discute si los síntomas digestivos provocan un cuadro de inflamación generalizada o si al revés, la inflamación hace impacto sobre el parato digestivo. Yo me siento mucho más cómodo con la segunda idea.
Esto que acabo de describir tiene una enorme importancia en cuanto a la forma de tratar los problemas inflamatorios. Los iremos desarrollando en los siguientes artículos.
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